Corstiaan en camino con turistas en la reina negra
Corstiaan con los turistas americanos
Rue de la Ferronnerie cerca Centro Pompidu
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Después de algunas semanas entraban los primeros clientes. Señor Caillot se encargaba de las reservas y estaba bastante satisfecho. Pero yo de repente descubrí los turistas japoneses y americanos . Aparcaba la REINA NEGRA en los Campos Elisios o en la calle La Ferronerie, cerca del centro Pompidou. Decía en la frente del coche “Descubra a lo clásico la ciudad” llamar a ………..El negocio andaba como un tren y al final los viajitos de boda eran menos lucrativos. La policía me miró pero no tenían ninguna queja por mi permiso.(…..) Tenía un día hasta un a tarjeta de visita del Señor Jaques Chirac, entonces alcalde de Paris. La gente tenían interés en el motor de la REINA y yo siempre orgullosamente lo enseñaba. Una vez la policía dejó una multa por aparcar mal. En el formulario pusieron: Renault (…..) Tampoco lo pagué porque tenía una matrícula holandesa pegado encima de la gris/ negra francesa. Así nadie se dio cuenta que estaba haciendo negocio con un coche holandés. !!
La REINA NEGRA funcionaba también como taxi en el aeropuerto de Charles le Gaulle !
Cuando se presentaban poca ganancias o gastos inesperados me concentré en el aeropuerto de Paris. Los recorridos hasta el aeropuerto no eran sin riesgos. Un día aparcaba en la zona de los taxistas. Ellos me miraban con caras de poco amigos pero nadie me preguntó por permisos o identificación. Se abrió la puerta y acaricio un abogado ingles quien tenía mucha prisa. Esto no tenía nadie decirme dos veces……….Ya estaba en la segunda a 80 Km. por hora antes que el cliente se daba cuenta que el coche no tenía taxímetro. “ Que pasa ,aguanta , cuanto va a costarme ¿ El hombre parecía inquieto . Decía yo- “No se preocupe el metro acaba de fallar ahora mismo. Llegará Vd. a su destino. Esta empresa tiene este coche ya 30 años.(…)” El abogado llego bien a su destino y yo cobraba siempre el precio justo.
Después de un par de recorridos. Ya no iría más veces al aeropuerto. Comenzó ser demasiado arriesgado. Tampoco tenia muchas ganas en tener problemas con los taxistas.
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